Este finde solo he podido escaparme un rato a spinning, con la idea/excusa de probar unos señuelos low cost.
Aprovechando que tenía la tarde del sábado libre, me acerqué a la playa a pescar con la puesta del Sol.
Para algunos, el viernes fue llegar y besar el santo, nada más bajar del coche pillaron a Iván sacando una dorada, que terminó la jornada con un par de sargos.