Este año no tengo muchas ganas de ir a por doradas, la verdad es que ya no me motiva salir solo a por ellas y si no fuera por quedar con los amigos apenas saldría a surf.
Hacía meses que no me juntaba con Javixi, además me apetecía remar un poco para probar la espalda, así que cuando Iván me comentó que habían quedado para este finde no me lo pensé demasiado.
Teníamos intención de madrugar, pero al final quedamos por la mañana, montamos con calma y para cuando llegaron los hermanos yo tenía mis cañas listas e Iván que no pensaba entrar ya tenía las suyas lanzadas.
Teníamos intención de madrugar, pero al final quedamos por la mañana, montamos con calma y para cuando llegaron los hermanos yo tenía mis cañas listas e Iván que no pensaba entrar ya tenía las suyas lanzadas.
El mar pintaba mal (olas de casi 1 m), pero no hacía viento y el oleaje estaba bajando, así que me animé a entrar el primero... primer intento y vuelco en la orilla... me mojé entero jejeje en ese momento no le di más importancia, pero si lo llego a saber no me meto... con lo que me costó llegar y me encontré las cametas liadas... como si me entretengo a desliar me mareo, así se fueron al fondo y volví surfeando las olas con un cabreo de tres pares...
Mareado y cansado, nada más pisar la orilla me prometí no volver a entrar y fui a sentarme bajo la sombrilla para reponerme.
Entraron ellos y Bollo volcó 2 veces, entre que el mar estaba fuerte y que se le llenó el kayak de agua, al final tuvo que salir nadando... parecía que no habíamos elegido bien el día... la primera ronda y ni rastro de doradas.
El mal humor se nos pasó rápido con el almuerzo, y tras una falsa picada en una de mis cañas (resultó ser un matojo de algas), decidí volver a entrar.
Todo fue como la seda, el mar se había quedado espectacular, lo único que empezaba a aparecer un poco de corriente.
No se hizo demasiado de rogar la primera destensada, corrí hacia la caña y clavé... aquello empezó a dar tirones y sacarme hilo... la adrenalina hizo acto de presencia... tras 3 intentos de irse dentro y una docena de cabezazos, empezó a acercarse a la orilla... recogía a saco pero no la notaba, por un momento temía haberla perdido... fue llegar al escalón y zas!!! carrerón hacia las cañas de Iván... la paré un poco y me acerqué para encararla de frente... antes de verla ya noté el peso real y me aventuré a predecir que pesaría kilo y medio.
Entraron ellos y Bollo volcó 2 veces, entre que el mar estaba fuerte y que se le llenó el kayak de agua, al final tuvo que salir nadando... parecía que no habíamos elegido bien el día... la primera ronda y ni rastro de doradas.
El mal humor se nos pasó rápido con el almuerzo, y tras una falsa picada en una de mis cañas (resultó ser un matojo de algas), decidí volver a entrar.
Todo fue como la seda, el mar se había quedado espectacular, lo único que empezaba a aparecer un poco de corriente.
No se hizo demasiado de rogar la primera destensada, corrí hacia la caña y clavé... aquello empezó a dar tirones y sacarme hilo... la adrenalina hizo acto de presencia... tras 3 intentos de irse dentro y una docena de cabezazos, empezó a acercarse a la orilla... recogía a saco pero no la notaba, por un momento temía haberla perdido... fue llegar al escalón y zas!!! carrerón hacia las cañas de Iván... la paré un poco y me acerqué para encararla de frente... antes de verla ya noté el peso real y me aventuré a predecir que pesaría kilo y medio.
Tras una buena pelea en la orilla la pude poner en seco y admirarla, sobre 1,800 andaba, bastante gorda, tragada hasta las trancas y aún así peleona como la que más.
No estaba mal, apenas llevábamos hora y media en la playa y ya teníamos una pieza de porte.
Poco tardaron en verse más picadas y destensadas de cañas, la siguiente le tocó a Bollo:
No estaba mal, apenas llevábamos hora y media en la playa y ya teníamos una pieza de porte.
Poco tardaron en verse más picadas y destensadas de cañas, la siguiente le tocó a Bollo:
Sobre kilo y tres cuartos, preciosa y rubia (aunque en esta foto no se aprecia porque está rebozada de arena) tras un largo debate y por decisión divida, se admitió que eran del mismo tamaño pero la mía estaba más gorda jejeje (es lo que tiene no llevar la báscula).
Y la más bonita (aunque un poco más pequeña, sobre el kilo y medio) fue la que sacó Javixi:
También fue la útima y la que más tardó en picar, a partir de ahí se acabó la pesca porque se levantó un viento fuerte y racheado que nos obligó a recoger.
La nota graciosa del día la puso una doradella clavada en la línea que rompió Iván y que Javixi sacó liada en la suya, el recochineo fue bueno, una pena haber roto porque no salvó la porra y encima al vecino le regaló el doblete jejeje
Aguantamos como pudimos al abrigo de las sombrillas y nos comimos un arroz al horno con arena jejeje luego nos fuimos al bar a tomar cafe.
Extraña jornada, breve pero intensa, bastante productiva para haber pescado poco más que un par de horas, incluso diría que los inconvenientes la hicieron más épica, pasando de ser una jornada desastrosa a una pequeña aventura.
Primer encuentro con las doradas positivo, espero que la siguiente sea igual de peleona y, puestos a pedir, que sea un kilo más grande... esperando la próxima salida ;)
Jejeje manguiiií con las cañitas q me gastas y los carreticos a ver si te animas un poquito mas y te vienes a porrear los viernes con los colegas y tomar unas birras a partir de ahora q hace buen tiempo
ResponderEliminarJejeje manguiiií con las cañitas q me gastas y los carreticos a ver si te animas un poquito mas y te vienes a porrear los viernes con los colegas y tomar unas birras a partir de ahora q hace buen tiempo
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