Empezamos el viernes, tras salir del trabajo, me preparé el equipo y fui a Benicássim con Pablo, playa porrera donde las haya, pero me gusta mucho el sitio y es cómodo, la compañía es buena y, en algunas ocasiones, salen buenos llobarros este año.
La salida estaba planteada para el llobarro, pero se calmó mucho el mar durante el día y decidí comprar algo de gusano (como las tiendas estaban cerradas tuve que comprarlo en decathlon...)
Probamos un poco de todo, calamar, tita, americano... ni picada en toda la noche, así que no alargué mucho la jornada y volví a casa pronto.
Como siempre que estoy con ganas y me acabo de comer una porra, intento ir al día siguiente a mi playa fetiche para resarcirme jejeje y así lo hice.
Aproveché que no había quedado con nadie para ver si enganchaba a algún veterano del foro, que últimamente están caros de ver jejeje y di con Fran y José que querían subir también, así que me apunté con ellos.
Nada más llegar compruebo que mi preocupación por los trasmallos era cierta, nos encontramos de nuevo la playa sembrada de banderas... así que la técnica la de siempre, localizarlas, buscar un hueco sin redes y tratar de pescar como si no estuvieran...
Como tenía americano y tita del día anterior, decidí utililzarlos durante la tarde (que no suele picar nada) y lo que sobrara guardarlo de reserva.
Mientras tanto me puse a buscar jureles con la sakura porque José había sacado uno, pero o eran muy pequeños o no habían demasiados porque no le entraron al señuelo.
Lo de gastar primero el cebo malo fue un error porque las doradas aparecieron más pronto de lo que esperaba y me pillaron en bragas... tanto José como Fran sacaron una dorada de ración mientras yo no tenía ni picada...
Me apresuré en cambiar el cebo por cebo del terreno pero erré la distancia, así que me tuve que conformar con ver a Fran sacar otra dorada...
Nos pusimos a cenar y tras terminar me tocó el turno a mí, clavé 4 doradas y saqué 2 (las de la foto de arriba) una de ración y otra de medio kilo, las que perdí tampoco eran gran cosa, así que tampoco me importó, ya tenía la comida para el domingo que es lo que quería mi novia jejeje
Pensé que tendríamos una buena jornada porque salieron varias horas seguidas, pero cambió el viento a gregal y se quedó el agua como un plato, aguantamos hasta las 3 pero no tuvimos más picadas.
No fue una gran noche, pero lo pasamos bien, hacía tiempo que no nos juntábamos y la noche pasó volando en tan buena compañía.
Las capturas de los compañeros:
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