Puesto que me voy de vacaciones y no podré pescar, aproveché ayer para hacer una escapadita rápida y gastar el cebo que me quedaba en casa.
Resultado una doradella que no llega a los 400 gr, pero mejor que una porra, entre el resto de compañeros salieron media docena de mabras y una dorada kilera, para el viento que hacía y la luna llena no fue mala jornada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario