Si antes decía que no recomendaba la pesca de especie para iniciarse en el
surfcasting, es precisamente por lo escasa que es esta especie y lo poco frecuente que son los ejemplares grandes en nuestras playas.
¿Dónde y cuando buscarlos?
En cualquier playa de fondo de arena o mixto es buen sitio para dar con
ellos, por lo tanto la mayoría de playas de la provincia, con la
particularidad de que según el calado de la playa podemos dar con ellas a
mayor o menor distancia, de Nules hacia Valencia podemos dar con los
grandes desde los 20m mientras que en playas más someras pueden estar lejos.
Una vez en la orilla interesaría situarnos en alguna corriente de entrada, sobretodo si vemos que acumula conchas en la orilla, pegados a algún espigón, suelen moverse bastante para buscar comida y no dejan nada por revisar, por lo que no es de extrañar encontrarlos en un palmo de agua o pegados a una piedra, será más fácil que en una playa de arena abierta.
No diría que quieren un tipo de condiciones especiales, igual salen con el agua como un plato como movida, pero si tuviera que buscarlos sería después de un temporal o un dia que pegue un buen poniente/garbí según que playa, con el agua turbia e incluso chocolate se sacan los de mayor tamaño.
Se puede dar con ellos todo el año pero la
mejor época es de Noviembre a Mayo y la razón es que los ejemplares adultos prefieren el agua más fría, es habitual que para después de fallas y tras los temporales de poniente aparezacan grandes bancos de corvalls entrando por las noches en las playas.
Se pueden pescar a cualquier hora del día, siendo sin duda la noche cuando más
se acercan a la orilla, así que yo siempre he preferido buscarlos de
noche.
Respecto a la luna no tengo excesivas preferencias, me gusta en cuarto
creciente, nueva, y llena si el mar está plato porque se anima por la
noche por la luna.
¿Cómo se pescan?
Lo primero (e imprescindible) que debemos hacer es localizarlos, y ya no solo en el agua, sino en la playa, al ir en bancos suelen aparecer en una playa concreta durante unos días al año y poco más, por lo que es fundamental conocer por donde se mueven para ir a por ellos.
Luego ya los buscaremos en el agua, para ello lanzamos una caña larga y otra corta, preferiblemente una en
cada escalón.
No hay que tener miedo a lanzar en la misma orilla, como comenté antes se acercan mucho y pueden estar ahí delante y ser de buen tamaño (motivo por el cual siempre los suelen encontrar los pescadores más veteranos).
Su batalla hasta la orilla suele ser épica si la captura es de buen tamaño, siempre ofrecen una buena batalla, empiezan con tirones seguidos tipo mabra, pero cuando llegan a las olas se pegan buenas carreras como los llobarros, son muy divertidos de pescar.
Así de simple es este pesca, pero es una de las que menos recompensa en número de capturas ofrece en nuestras playas, una lástima, ya que además su carne es muy apreciada para comer.
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